Cita: Hola compañero, me honra que estés por aquí, cuéntanos ¿Quién es Xavier Beltrán y qué le une a la literatura?
Xavier: Xavier Beltrán es un traductor literario que sueña con ser
escritor. Lo que me une a la literatura es, por tanto, evidente (más allá de que
la lectura sea mi principal afición): mi profesión y mi mayor deseo. Con lo
primero ya lo estoy consiguiendo; a ver si con lo segundo me pongo las pilas de
una vez. Tengo una novela medio empezada pero por falta de tiempo y por una
inspiración intermitente de momento no he seguido.
Cita: ¿Qué fue lo que te incitó a hacerte blogger?
Xavier: Llevaba ya unos cuantos años participando en un par de foros
literarios cuando descubrí que uno de los amigos que hice por allí se había
abierto un blog y estaba contentísimo. De hecho, fue él el que me animó a
lanzarme y comenzar a escribir reseñas. A partir de entonces empezaron a menguar
mis intervenciones en los foros y me centré en el blog, con el que también me he
llevado enormes alegrías (y espero que siga siendo así).
Cita: Tras la lluvia literaria. ¿De dónde viene ese título?
Xavier: Hace más o menos un mes celebré los dos años y desvelé el misterio.
Es una referencia al primer relato que escribí, cuyo título era Llueve, y
a la sensación que tengo, como lector, de que las novedades que mes a mes nos
sorprenden en las librerías hacen las veces de una lluvia constante. El blog
pretende ser una especie de paraguas para valorar qué libros valen la pena y
cuáles quizá no tanto. Contado así parece que yo quiera sentar cátedra, pero
nada más lejos de la realidad: siempre he dicho que en el blog mis opiniones son
mías y no tenemos por qué coincidir. Lo que sí intento es esgrimir algunos
argumentos más o menos objetivos para que la persona que se encuentre con mi
reseña sepa a qué atenerse con esa novela en cuestión.
Cita: En mi caso, aterricé en tu blog por casualidad, ya sabes, un blog te
lleva a otro... Pero lo que me hizo quedarme fue la claridad con la que te haces
entender y el poco interés “comercial” que destilan tus artículos, es decir, que
vas totalmente a tu rollo sin importante demasiado la línea que llevan el resto
de blogs de la blogosfera entre los que me incluyo. ¿Crees que ahí radica tu
éxito como blogger? Porque tu número de seguidores tanto en el blog como en las
redes sociales es de admirar.
Xavier: ¡Muchas gracias por tus palabras! No sé si me salgo de esa línea de
la que hablas o no, ni sé si realmente existe esa semejanza temática a la que te
refieres, pero lo que sí tengo claro es que en todo momento leo lo que me
apetece y cuando me apetece. En ocasiones se trata de una novela recién
publicada; en otras, en cambio, hablo de libros que tienen unos años ya o
incluso de grandes clásicos de la literatura. Me cuesta hablar de "éxito como
bloguero", me da hasta vergüenza llegar a pensarlo, aunque es verdad que cada
vez cuento con más seguidores en el blog y las redes sociales. Las razones para
ello quizá deberíamos preguntarlas a los que me siguen a menudo; yo solo procuro
mantener un buen ritmo de reseñas (unas dos a la semana, si puedo) y las escribo
a mi manera. Desde aquí os doy las gracias a todos por leerme y seguir mis
publicaciones. Sin vosotros no soy nada, razón tenían los de Amaral.
Cita: ¿Qué opinas de las iniciativas blogueras
como son los sorteos, las lecturas conjuntas, los retos...? Te hago esta
pregunta porque, como te he dicho en la pregunta anterior, veo que tu eres muy
“hippie”, vas a tu bola, y aun así, encajas a la
perfección.
Xavier: ¡Es verdad! No participo en casi nada,
soy así de autista... No sé si, como dices, encajo a la perfección o habrá quien
me vea como un soso solitario, pero no voy a cambiar mi modo de actuar con el
blog. La verdad es que son iniciativas que me encantan, son muy interesantes,
pero si no participo es por una sencilla razón: no me gusta obligarme a leer un
libro, o varios, en un tiempo determinado. Yo me dejo llevar por lo que me
apetece en cada momento y las lecturas conjuntas o los retos condicionan el
orden de los libros, y eso es lo que a mí no me gusta nada. En cierto modo,
llevándolo al extremo, reducen la libertad de elección, ese instante mágico en
que me planto ante mis estanterías y elijo qué libro voy a comenzar, y es un
momento que no quiero perder por nada del mundo. En sorteos sí que participo si
el libro que se puede ganar me llama mucho, aunque no me gusta promocionarlos en
mi blog para ganar más puntos. Si el azar quiere que me lleve esa novela, me la
llevaré tenga 2 puntos o 30, así que dejo seguir el curso de los
acontecimientos.
Cita: Cambio de tercio. Háblanos de tus géneros literarios favoritos y qué encantos ves en ellos.
Xavier: Si tuviera que quedarme solo con uno, diría la novela histórica. Me
encanta la Historia con mayúscula inicial y la posibilidad de asistir a un
relato ambientado en una época que jamás podré vivir y en un lugar que jamás
podré pisar me parece apasionante. Habrá quienes digan que no debemos tomar como
ciertas esas tramas, y no les falta razón -no en vano gran parte de ellas es
ficción-, pero uno siempre aprende algo cuando el autor se ha documentado bien.
Esa sed de conocimientos es la que me lleva a leer libros que transcurren en
Grecia, en Egipto, en Roma... Por otro lado, estoy muy unido a la novela
romántica, un género que ya se ha convertido en uno de mis preferidos. La pasión
que desprenden esas historias y los sentimientos que arrancan en mí son la clave
que explica la admiración que siento. A cualquier novela le pido que me emocione
con alguno de sus ingredientes (con la prosa, la historia, los personajes, etc.)
y una buena novela romántica lo tiene fácil para hacerme llorar de alegría o
tristeza. Tampoco hago ascos a las sagas literarias ni a las novelas policíacas
o fantásticas. En realidad leo casi de todo. Quizá los que menos me llamen sean
la ciencia-ficción y el terror, pero me apetece quitarme la espinita y ojalá lo
haga pronto.
Cita: ¿Qué libro te hubiese gustado escribir?
Xavier: Todos los que me han llevado a sentir algo fuerte. Ya he comentado
que me encantaría ser escritor y en el libro que tengo empezado mi objetivo es
precisamente ese: emocionar al lector. Que lo termine y no se quede como cuando
lo empecé. Que experimente los sentimientos que he descrito. Que días después de
haberlo leído recuerde alguna de las situaciones y sonría con ternura. Cualquier
novela que consigue que yo termine la lectura con una sonrisa en los labios es
más que recomendable para mí y envidio profundamente al autor por haberlo
logrado.
Cita: ¿Te identificas con algún autor? En caso positivo, ¿con cuál? ¿Por qué?
Xavier: Creo que es muy difícil identificarse con un autor. Para ello
habría que conocerlo, saber cómo ha llegado a la literatura y el esfuerzo que le
ha valido. Me puedo identificar con algunos personajes, con una historia en
particular, pero no con un autor. Por ahora. Ya tengo suficiente identificándome
conmigo mismo...
Cita: Tienes que mojarte, ¿cuál es tu novela favorita?
Xavier: Me hace mucha gracia cuando hay tanta gente incapaz de responder a
esa pregunta. A mí no me cuesta nada porque lo tengo clarísimo: La casa de
los espíritus, de Isabel Allende. Tenía yo unos quince o dieciséis años,
hace ya... unos cuantos, cuando sentí un hormigueo literario. Me apetecía
comenzar una novela porque sí, no porque fuera una lectura obligada del
instituto. Recuerdo que fui a la librería que había -y aún hay- delante de mi
instituto y empecé a hojear los libros. Me llamó bastante la historia que narra
Allende y me hice con ella. Pocos días después, la había devorado. Me metí tanto
en la novela y sentí tal cantidad de emociones que ahí y entonces despertó mi
amor por la literatura. Por tanto, mi novela favorita es la que me captó a la
secta de los amantes de los libros y que hizo posible que hoy pueda estar
respondiendo a esta entrevista, entre otras cosas. Le debo mucho a Esteban
Trueba y compañía.
Cita: ¿Con qué novela te llevaste esa “gran decepción”?
Xavier: Hay tantas decepciones en mi currículum como lector. Desde premios
Nobel reconocidísimos (La colmena, de Cela, me pareció insufrible; la
prosa de Vargas Llosa en La ciudad y los perros se me atragantó; la
historia de El viejo y el mar, de Hemingway, me aburrió sobremanera)
hasta autores que gozan con gran prestigio y que a mí no me han llegado en
absoluto, como Álvaro Pombo, Virginia Woolf, Oscar Wilde o Jaume Cabré. Tal vez
una de las decepciones más sonadas fuera en su día El perfume, de
Süskind. Estuve a punto de comprar el libro y suerte que al final me lo
prestaron. Me gustó tan poco que no sé cómo habría reaccionado si hubiera pagado
por él.
Cita: Hace poco escribiste un post que defendía a capa y espada el género romántico, un género que ha sufrido en los últimos tiempos un gran decrecimiento. En pocas palabras, ¿qué tiene este género que lo diferencie de los demás? ¿Crees que se ve afectado por el nuevo movimiento chick–lit?
Xavier: Me he adelantado un poco en una de las respuestas anteriores. Lo
que de verdad me apena es que sea uno de los géneros que arrastra más prejuicios
y peor fama cuando lo único que hace es describir el amor, uno de los
sentimientos más puros, deseados y añorados del ser humano. Claro que hay
novelas románticas empalagosas, infumables y mal escritas, pero ¿acaso se salva
alguno de los otros géneros? Además, hay un argumento que me parece clave para
destacar su importancia y echar por tierra las razones de quienes la
menosprecian: es el único género que está presente en cualquiera de los otros.
¿En qué libro no hay una historia de amor? En novelas históricas, en
thrillers, hasta en ciencia-ficción encontramos algún romance entre las
páginas. El problema es cuando pasa a ser la trama principal y la gente se cree
que entonces no podrá con ella. ¿Por qué no? Yo he leído historias de amor
preciosas en novelas no románticas, ¿por qué me iba a negar a dar una
oportunidad al género? Los libros chick-lit no creo que sean ningún
obstáculo, aunque es cierto que hay quien ve en ellos demasiada frivolidad. A mí
me encantan las situaciones disparatadas y divertidas que leo, me hacen pasar
muy buenos ratos, y creo que todos necesitamos un poco de humor en nuestras
vidas de vez en cuando.
Cita: ¿Cuáles crees que son los mayores prejuicios o barreras que solemos ponernos los lectores a la hora de enfrentarnos a un libro que no es de “nuestro estilo” o a un autor que no conocemos? Porque está claro que nunca se lee un libro con miedo, deben ser otros factores los que hacen que lo leamos con otros ojos...
Xavier: Simplemente eso: prejuicios. Tenemos
ideas preconcebidas, gran parte de ellas absurdas, que nos imponen una imagen
quizá distorsionada que no tiene por qué reflejar la realidad. Yo, por ejemplo,
cuando pienso en ciencia-ficción, me imagino un mundo futurista muy tecnológico
y aburrido. Ya sé que es una descripción tonta, pero es lo que yo visualizo. Una
vez formado ese escenario irreal, cuesta dar el paso para superar el prejuicio y
acercarse a una de esas obras para, tal vez, ver que nada tiene que ver con lo
que se pensaba. A mí me apetece leer El juego de Ender o alguna obra
cumbre del género para eliminar de una vez ese concepto que me dejó la lectura
de Un mundo feliz, que no me gustó especialmente. Eso tampoco ayuda: si
el primer contacto con una novela de un género no es satisfactorio, cuesta darle
una nueva oportunidad. Es injusto, porque quizá no hemos acertado con la
apuesta, pero es así.
Cita: Todo buen lector tiene un ritual de lectura, o al menos, le gusta leer, cuando puede, de alguna manera concreta. ¿Cuál es el tuyo?
Xavier: Ahora mismo yo tengo dos rutinas de
lectura: en el tren y antes de dormir. Los días que trabajo tengo una hora y
pico en tren -sumando ida y vuelta-, tiempo que siempre aprovecho para leer.
Aunque esté con una novela de mil páginas, me la llevo en la bolsa y la saco
felizmente en el vagón. Alguna que otra vez he visto a alguien que mira el libro
en plan: "Menudo tocho", y yo sonrío. Resumiendo: más de una hora que leo, sí o
sí, al día. Una hora equivale a entre 40 y 60 páginas, y suelo rematar antes de
irme a dormir leyendo una horita más. En total no me gusta leer más de 100 o 150
páginas al día porque si no termino demasiado rápido los libros, aunque debo
admitir que ha habido novelas que he engullido en un solo día o en un par.
También hay veces, aunque son minoría, en que me siento en el sofá a media tarde
si no trabajo para acabar una trama que me tiene totalmente absorbido.
Cita: Recomiéndame varios blogs literarios que para ti sean de
categoría.
Xavier: Me da apuro dejarme alguno y que su administrador/a me tire de las
orejas, así que no lo haré. Lo que sí me atrevo a hacer es describir cómo es
para mí un blog literario diez. En primer lugar, uno que esté bien escrito. Lo
siento, pero por formación profesional no puedo con las faltas de ortografía, y
en un blog literario me parecen un crimen. No debería ser así, pero yo leo una
reseña mal escrita y ya casi me parece menos convincente, menos verdadera. En
segundo lugar, que el bloguero no escriba reseñas demasiado largas. Yo lo que
busco es una opinión argumentada pero concisa; ya decidiré luego si leo la
novela o no, no me interesa conocer de antemano todo lo que voy a hallar en
ella. En tercer lugar, que carezca del lado personal que muchos les dan a sus
blogs. Me refiero a empezar una reseña con un "¡Hola, amigos! ¿Qué tal va la
semana? Espero que estéis bien :D". Sé que muchos lo hacéis y ahora me miraréis
mal y os pido disculpas antes, pero ese tono falsamente cordial me chirría
muchísimo. A pesar de que lo respeto (¡faltaría más!), es algo ante lo que
enarco la ceja una y otra vez. Y hay más factores, pero no quiero perder
seguidores ni hacer más enemigos.
Cita: ¿Cómo ves a los nuevos talentos españoles? ¿Crees que tienen posibilidades de triunfar entre tanto clásico?
Xavier: Cada vez estoy más contento por los escritores de aquí. No solo han
logrado convencer a editores y lectores de que vale la pena apostar por ellos,
sino que han sabido hacerse un hueco en géneros en los que hace unos años eran
casi invisibles -como la novela histórica o la romántica-. Poco a poco son más
los que se cuelan entre los boletines de novedades de las editoriales y a mí me
encanta. Más que nada porque me parece injusto que siempre valoremos mejor lo
extranjero a lo propio. Ya sé, nadie es profeta en su tierra, pero en España
tenemos la simpática manía de restar importancia y valor a lo nuestro y tragar
lo foráneo como si tal cosa. Por eso me gusta que los autores de aquí ganen más
presencia: es un toque de atención para los que siguen pensando que en nuestro
país no hay talento. Lo hay, y de un nivel altísimo.
Cita: Háblame del Xavier de andar por casa, ¿cómo es su día a día?
Xavier: Ahora mismo tengo la suerte de trabajar en una de las grandes
librerías de España a media jornada, y la otra media la dedico a traducir -si
estoy con alguna traducción- o, simplemente, a vivir lo mejor que sé y puedo. En
general, soy la mar de feliz en casita con un libro, en el trabajo
recomendándolos o de comida y cena con los míos. Así que mi día a día es
bastante tranquilo, acorde con mi personalidad. No quiero desvelar más de mí
mismo porque entonces pasaré a ser una persona de carne y hueso para vosotros,
no un bloguero maravilloso y humilde que regenta el mejor blog de reseñas que ha
abierto un inquilino del número 2 de mi calle.
Cita: ¿Tienes algún plan o proyecto literario más allá de “Tras la lluvia literaria”?
Xavier: Al contrario que Umbral, yo no venía a hablar de mi libro y mira,
ya lo he mencionado unas doce o trece veces. Sí, me encantaría terminar la
historia que estoy escribiendo y que un día viera la luz. Por si os interesa, se
trata de una novela romántica (cerrad la puerta al salir, prejuzgones) que
aspira a divertir y emocionar a partes iguales. Salvando las evidentes y
gigantescas distancias, es una mezcla entre El cuaderno de Noah y
Posdata: Te amo, dos de mis libros preferidos del género. Tuve la idea
del argumento durante un sueño hace ya muchos años y desde entonces le voy dando
vueltas con más o menos esfuerzo. Las musas a veces me abandonan durante semanas
y luego en una tarde me dictan diez páginas. Qué le vamos a hacer, son así de
selectivas. Cuando me hayan susurrado el punto y final, ya me veréis anunciando
mi libro por todas partes.
Cita: Para despedirnos, manda un mensaje a favor de la literatura a todos los que están leyendo esta entrevista.
Xavier: Supongo que cualquiera que lea estas respuestas ya estará a favor
de la literatura. Yo solo pido que jamás dejemos de apoyarla, de soñar, de
sonreír, de afrontar la vida con un poco de humor y optimismo. Sé que nos ha
tocado vivir momentos complicados, pero el refranero español es muy sabio y dice
que no hay mal que cien años dure. Hagámosle caso y sepamos levantarnos todos
los días con ganas de comernos el mundo.
Cita: Ha sido un auténtico placer que vengas hasta aquí a acurrucarte un ratito a charlar. Sabes que tienes las puertas de mi casa abiertas para cuando lo desees, pero la próxima vez, que será cuando te haga la entrevista de autor y no de blogger ¡tráeme unos bombones! je, je, je
Xavier: Me puede el dulce, de camino a tu blog me lo he comido todo.
Prometo traerte algo salado la próxima vez, y así sí podré resistirme. Cuando
menos, haré lo posible. Palabrita.
¿Es o no es extremadamente amable? A mi me ha conquistado, ¿Y a vosotros/as?
Espero que os haya gustado esta charla con Xavier Beltrán y como dije la vez anterior, ¡estad atentos! ¡cualquiera de vosotros puede ser el siguiente!