El talento de Nano, de Mercedes Pinto Maldonado

Este es el único libro que me quedaba por leer de la autora. Mi kindle se había negado a reproducirlo y amazon no quería vendérmelo dos veces, con lo cual me resigné a dejarlo pasar hasta encontrar la manera de poderlo leer. Como por arte de magia, un ángel en forma de amigo que había conseguido los últimos ejemplares editados en papel de esta novela juvenil, me regaló por reyes uno de ello. ¡Imaginaos como me puse de contenta! En menos de veinticuatro horas le di buena cuenta, y aquí estoy para contaros mis impresiones.

SINOPSIS

Nano es un muchacho, tímido, frágil y despistado, abocado a una prolongada soledad por el rechazo constante al que se ve sometido por sus compañeros. Este aislamiento involuntario, indirectamente, le ayuda a pasar muchas horas haciendo lo que más le gusta: escribir y dibujar. Las largas horas de retiro que pasa en su cuarto dan lugar a que desarrolle una gran imaginación, y es precisamente esta fantasía la que finalmente le da la oportunidad de ser escuchado y aceptado por los chicos de su edad.

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MI OPINIÓN PERSONAL

El talento de Nano es la primera obra que publicó la autora. Una novela juvenil con una frescura y una inocencia que lo corroboran. Es cierto que desde entonces hasta hoy, el estilo y las artes de Mercedes se han depurado y pulido notablemente, pero igual de certero es que si en la actualidad hubiera tenido que escribir esta novela, no la habría escrito con tanta maestría. Este trabajo es un claro ejemplo de que cada cosa tiene su momento, y Nano nació en el momento exacto, ya que es una obra fresca, tierna, inocente, cautivadora y muy atrayente.

Nunca pensé que de todos los personajes que conozco de Mercedes Pinto, con el que más me iba a identificar sería con Nano, pero tengo que reconocer que así es. Nano es un muchacho introvertido, víctima de la burla de sus compañeros por ser delgaducho y "gafotas", no tiene amigos y siempre está encerrado en su habitación dando rienda suelta a su imaginación. Cuenta con la entrañable compañía de su Perro Weno, con el que comparte paseos y confidencias y se muestra tímido ante la niña de la que está enamorado.

Ir pasando las páginas de este libro, acompañar a Nano en el transcurso de los capítulos y sentir cómo la barriga me hacía cosquillas en según qué situaciones me ha hecho entender que no solo merece la pena leer novelas destinadas al púbico adulto, pues El talento de Nano está orientada para los jóvenes y sin embargo ha removido en mi algo más que puro entretenimiento o diversión: me ha tocado los sentimientos.

Y cuando una novela te llega, los personajes salen de sus páginas y pasean por tu casa, te hacen sentir el frío de sus cuerpos cuando están calados hasta los huesos o el bochorno por la vergüenza cuando pasan por una situación desagradable para ellos, cuando esto sucede, no importa nada más. La novela te ha cautivado, has pasado a formar parte de ella y nada podrás hacer para evitarlo. Y esto es lo que sucede con El talento de Nano, que cuando menos te lo esperas estás ahí, con él, en su casa o en el colegio dando clase de lengua con Don Rafael.

Tengo que destacar, que todas las ilustraciones que aparecen en la novela también son obra de la autora, son magníficas, merece la pena verlas, de verdad. Dan una vida y un realismo al libro impresionantes. 

Admito que con los libros de Mercedes me pasa como con el chocolate, sé que me van a gustar antes de abrirlos, pero no me equivoco, de la misma manera que si el chocolate amarga mucho o está demasiado empalagoso no vuelvo a consumir chocolate de este tipo, haría lo mismo con sus novelas, pero de momento, todos lo palos que Mercedes a tocado, los ha tocado con una maestría indudable.

CONCLUSIÓN FINAL

Por si ha quedado alguna duda de si la novela es o no recomendable para todos los públicos la respuesta es un sí rotundo. Porque no hay que ser pequeño para sentirse un niño ni ser infantil para degustar este tipo de novelas. Al contrario. Con la madurez y la experiencia que tenemos los lectores habituales, sabremos sacarle mucho más partido a esta novela, pues en ella no veremos solo la historia de este pequeño niño tímido y despistado, también nos pondremos en la piel de sus padres, profesores y compañeros de clase.

Es tan fácil empatizar con los personajes y tan sencilla su lectura por lo claro de su narración que me resulta increíble pensar que una novela como El talento de Nano pudiera tener detractores. 

Si la lees, te gustará seguro, ¿apostamos?

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